Portal AAIQ - ''El real y el peso nunca valieron un dólar''

Críticas a la receta monetaria de los 90

El presidente electo de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, aseguró ayer en el Congreso que la crisis que viven los países del Mercosur “es política” y adjudicó la actual situación económica de su país y la de la Argentina a la sobrevaluación de sus respectivas monedas durante la década del 90.
“Un real nunca valió un dólar. Un peso nunca valió un dólar, y cuando la economía no está fundada en algo verdadero viene la crisis”, afirmó Lula al hablar ayer ante algo más de 40 legisladores nacionales.

El mandatario electo encabezó un modesto acto en el salón Arturo Illia del Senado, en el que reiteró uno de sus tópicos de campaña: la defensa a ultranza del fortalecimiento del Mercosur, ámbito por el que dijo que trabajaría “para que no sea apenas un lugar de acuerdos comerciales, sino un espacio de integración”.

Lula llegó al Parlamento minutos después de las 17 y mantuvo una breve reunión con el presidente provisional del Senado, Juan Carlos Maqueda (PJ-Córdoba), y el vicepresidente primero de la Cámara de Diputados, Oraldo Britos (PJ-San Luis), que reemplazó en la ocasión al titular de ese cuerpo, Eduardo Camaño (PJ-Buenos Aires), ocupado en otros menesteres políticos.

Una vez *********plidos el protocolo de la recepción y el intercambio de presentes celebrado en el Salón Gris de la Presidencia del Senado, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil enfrentó a algo más de 40 diputados y senadores que se apretaron para escucharlo en un salón atestado de periodistas y de curiosos.

“Una mentira” Lula calificó de una mentira la igualdad “uno a uno” de las monedas brasileña y argentina con el dólar para fundamentar su idea de que la devaluación a tiempo hubiese evitado la crisis en ambos países. “Si hubiesen devaluado simultáneamente sus monedas no se habría afectado ninguna de las dos economías”, afirmó. También hizo una encendida defensa del Parlamento como “garantía de la existencia de la democracia en nuestros países”.

Antes, Maqueda había agradecido el gesto de Lula de privilegiar a la Argentina como el primer destino que visita en su condición de presidente electo. “Se lo agradezco desde el corazón y desde el sufrimiento de nuestra crisis”, afirmó el presidente del Senado antes de citar una frase del escritor Bertolt Brecht para calificar a su visitante como “un gran luchador” y pedirle que siga adelante “con el mismo vigor y espíritu y que continúe levantando las banderas de la integración, la paz y la justicia”.

El salón Illia quedó pequeño ante la gran cantidad de legisladores que se hicieron presentes para darle la bienvenida y que hizo pensar a más de uno si no hubiese sido mejor haberlo recibido en el recinto de la Cámara.
El lugar estuvo colmado sobre todo por legisladores del espectro de centroizquierda, entre los que se destacó Elisa Carrió (ARI-Capital).
También hubo varios representantes del justicialismo, entre los que se destacó Saúl Ubaldini (PJ-Buenos Aires), que luchó a brazo partido por darle un abrazo a Lula y volvió a lucir para la ocasión la campera de cuero negra que lo caracterizó cuando fue secretario general de la CGT.

Gustavo Ybarra- LA NACION 03/12/2002 Política
http://www.lanacion.com.ar/02/12/03/dp_455449.asp